Archie Gemmill dejó su huella en el Mundial de 1978

‍Archie Gemmill es uno de los jugadores más famosos de Escocia. El centrocampista nació en Glasgow y jugó en varios clubes escoceses durante su carrera, pero fue su actuación en el Mundial de 1978 la que le valió el reconocimiento mundial. El gol de Archie contra Holanda se recuerda como uno de los mayores esfuerzos individuales en la historia del fútbol y ha sido votado por los aficionados al fútbol escocés como el tercer mejor momento del pasado del país. Archie Gemmill nació el día de Año Nuevo de 1957 y creció jugando en clubes masculinos de Dennistoun y el centro de Glasgow. Fichó por el Celtic cuando solo tenía 15 años, pero no jugó en el primer equipo antes de mudarse al Middlesbrough dos años después. En 1977, Archie fichó por el St Mirren y se convirtió en una parte integral del equipo que ganó el ascenso. Cuando los dejó después de dos temporadas, fichó cedido por el Aberdeen, donde sus actuaciones llamaron la atención de los ojeadores nacionales. Archie firmó con Nottingham Forest en 1980; pagaron £ 350.000 para asegurar sus servicios en un contrato de cinco años, una tarifa récord fuera de Inglaterra en ese momento. Su debut se produjo en septiembre de 1980 contra el Leeds United en Elland Road. Marcó dos goles en la victoria por 3-1. En 1981, Archie ganó la Supercopa de Europa con Forest y también consiguió una medalla de campeón de la Copa de la Liga gracias a su victoria final por 3-2 sobre el Liverpool en el estadio de Wembley.

Copa del Mundo de 1978

Si parpadeaste, es posible que te hayas perdido la aparición de Archie Gemmill en la Copa Mundial. Fue una incorporación tardía al equipo de Escocia después de que Billy McNeill se viera obligado a retirarse debido a una lesión. Archie anotó dos goles en sus dos partidos por la banda izquierda, pero no pudo evitar que Escocia terminara última de su grupo con sólo un punto. El momento más famoso de Escocia en el torneo se produjo cuando el compañero de equipo de Gemmill, Gordon McQueen, recogió el balón en su propio campo, pasó corriendo por el mediocampo holandés y luego disparó con potencia al portero holandés. Fue un momento que perdura en la infamia ya que la “puntada a tiempo” se había cosido en el momento equivocado.

La meta

El gol de Gemmill contra Holanda será recordado para siempre como uno de los mayores esfuerzos individuales en la historia del fútbol. Después de que Robbie McManus recibiera una falta en el borde del área, el balón cayó a Gemmill justo afuera del área de 18 yardas. Amagó al primer defensor, pasó al siguiente y luego pasó al último defensor antes de pasar al portero. El gol fue notable considerando las condiciones (estaba lloviendo) y la capacidad técnica necesaria para marcar semejante gol. Holanda era una de las favoritas para ganar el torneo y ya había logrado una victoria por 10-1 sobre Irán en su partido anterior. El gol de Gemmill fue el primer gol que concedió Holanda en el torneo.

Después del Mundial

El gol de Gemmill lo convirtió en un héroe nacional y fue recibido por miles de fanáticos cuando regresó a Escocia. Desafortunadamente para él, no hubo tiempo para celebraciones ya que tuvo que regresar a Nottingham para el próximo partido de liga del Forest. Gemmill siguió siendo jugador del Forest hasta 1984, cuando se fue para jugar en el Sunderland, disputando 84 partidos durante su estancia allí. En 1987 volvió a jugar en un club escocés cuando fichó por el Hibs. Gemmill se retiró del juego en 1988, pero siguió muy involucrado en el fútbol como entrenador y cazatalentos. Fue nombrado entrenador del St Johnstone en 1997 y los llevó a dos quintos puestos consecutivos en la Premier League escocesa.

Carrera posterior y legado

Es difícil destacar un momento de la carrera de Archie Gemmill, pero su gol contra Holanda es un gran punto de partida. Durante el Mundial, su gol fue celebrado como el momento que pondría al fútbol escocés en el mapa. Lamentablemente, la actuación de Escocia en ese torneo eclipsó el impacto de su gol, especialmente a los ojos de los aficionados al fútbol inglés. La actuación de Gemmill contra Holanda se produjo en un momento en que el fútbol inglés estaba a la vanguardia del deporte y se suponía que los ingleses eran mejores que todos los demás. El gol de Gemmill contribuyó en gran medida a disipar el mito de que el fútbol inglés era superior al que se jugaba en Escocia.

Conclusión

El gol de Archie Gemmill contra Holanda será recordado para siempre como uno de los mayores esfuerzos individuales en la historia del fútbol. Llegó en un momento en que Inglaterra estaba a la vanguardia de este deporte y se suponía que los ingleses eran mejores que todos los demás. El gol de Gemmill contribuyó en gran medida a disipar el mito de que el fútbol inglés era superior al que se jugaba en Escocia. Lamentablemente, la actuación de Gemmill en ese torneo pasó desapercibida a los ojos de los aficionados al fútbol inglés, y su gol contra Holanda llegó a representar al fútbol escocés más que cualquier otro. Afortunadamente, hay muchos aficionados al fútbol escocés que no han olvidado el impacto que Gemmill tuvo en su selección nacional.